Estoy cargando mi iPhone y se calienta: ¿Qué puedo hacer?

El iPhone se puede calentar por varias razones

Elegir un cargador adecuado para el iPhone es muy importante. No porque este tenga más potencia, significa que vaya a cargar más rápido el teléfono. La carga rápida suele ser un factor con el que se suelen elegir los adaptadores más rápidos y potentes. Pero esto se puede convertir en un proceso contraproducente, ya que el iPhone no es capaz de retener toda la energía que el cargador entrega. Esto hace que haya energía que se disipe en forma de calor, el cual se transmite hacia el propio teléfono, provocando un sobrecalentamiento de la batería y de otros componentes. Si tenemos un iPhone de carga rápida, lo más adecuado es utilizar adaptadores que estén alrededor de los 20W de potencia.

Se puede dar una situación concreta: estemos utilizando el iPhone mientras se está cargando. Si hacemos un uso que no es muy exigente, no tiene por qué calentarse demasiado. No obstante, si empezamos a utilizar varias aplicaciones de forma simultánea y con el brillo al máximo, entonces puede que este empiece a subir la temperatura. Por ello, una muy buena recomendación es bajar la intensidad de la pantalla, a la par que no estemos usando varias aplicaciones a la vez, como por ejemplo, una videollamada de FaceTime, compartiendo nuestra pantalla, mientras estamos en otra app. En casos como estos, el iPhone tiene más probabilidades de calentarse.

Si la salud de nuestra batería ya no está al 100%, ya que esta ha ido perdiendo facultades a lo largo del tiempo, y estamos en un porcentaje muy bajo, también puede calentarse. Esto puede ocurrir en aquellos iPhone que llevemos un tiempo utilizando, y nunca se les ha cambiado la batería. Y si estamos en un nivel muy bajo, el esfuerzo de cargar puede ser mayor que en condiciones normales. Ese trabajo extra es lo que hace que el iPhone se caliente. Es por ello que, si vemos que esto es algo habitual, disminuir la potencia del enchufe de carga puede ser una muy buena idea, ya que no entregaremos tanta energía de forma simultánea.

Un último truco para evitar que el iPhone se caliente demasiado es utilizar adaptadores de corriente y cables oficiales o certificados MFi. Puede parecer un detalle sin importancia, pero lo cierto es que, si son componentes que no están optimizados para los iPhone, la energía que entregan (y el modo en el que lo hacen) no va a estar alineada con lo que el teléfono necesita. Y si cargamos nuestro dispositivo con un adaptador que no es oficial (o no es MFi), este cargará acorde con el terminal para el que ha sido diseñado.